Como ocurre en el entorno web, son muchos los indicadores basados en
redes sociales que se pueden llegar a manejar. La medición de resultados es lo
que hace del marketing una ciencia, Lo que no
se puede medir no se puede mejorar y no se sabrá si el trabajo está siendo
realmente efectivo. La analítica web es el proceso de registro, análisis e
interpretación de datos que nos permite
estudiar y comprender el
comportamiento de los usuarios en la red para mejorar el rendimiento de nuestro
sitio web y de nuestra presencia en redes sociales. Una de las principales
ventajas de internet es que prácticamente todo lo que hacemos en la red es
medible, y esta medición la podemos hacer a través de herramientas como Google Analytics. Aunque los datos que
nos proporcione esta herramienta nos parezca abrumadora, lo cierto es que una
vez identifiquemos cuales son los indicadores de interés según nuestro modelo de negocio y nuestra actividad
online, extraer la información útil para tomar decisiones a lo largo del tiempo
pronto se convertirá en un hábito.
Para que las métricas funcionen es
importante establecer los objetivos. Lo mejor será plantearlos de manera
mensual, por lo tanto si tienes las métricas adecuadas, será mucho más fácil
cumplir tus objetivos. A continuación te describo la terminología del marketing
en la web de uso común para describir los efectos y resultados del marketing en
línea.
Tiempo
de permanencia
(duración). Es el tiempo promedio que
dura un visitante en un sitio web. El tiempo de permanencia es importante para
las empresas, ya que cuanto más tiempo invierta un visitante en un sitio web,
mayor será la probabilidad de que realice una compra.
Tasa
de conversión: mide
el porcentaje de visitantes que en realidad compran algo. Por ejemplo: (300
leads convertidos/1.000 visitantes) *100= tasa de conversión de leads del 30%
Alcance.
Se
trata de una medida de visibilidad de un sitio web, de un producto o servicio
en los distintos medios digitales utilizados. Hace referencia al número de personas
que han visitado nuestra web o al número de personas a las que se ha mostrado
un anuncio en redes sociales.
Impresiones.
Una
impresión es el número de veces que se
muestra un anuncio al público sin necesidad de una interacción directa de éste como
podría ser un clic o una conversión. Por lo que debemos ser bien creativos para
que nuestro anuncio genere un fuerte impacto en la mente de los usuarios.
Tasa
de apertura. (0pen
rate). Mide el porcentaje de
clientes que abren un correo y están expuestos al mensaje. Si se han enviado
200 e-mail y se abrieron 40, (40/200)*100.
La tasa de apertura será del 20%.
Clic
Through Rate
(CTR) Mide el porcentaje de personas
expuestas a un anuncio en línea y que en realidad hacen clic en el anuncio.
CTR= (clics/impresiones) x100 = (60/300)*100=
20% CTR = 20%
Tasa
de Rebote. Es
el porcentaje que indica cuantos visitantes accedieron a una página de tu sitio
web y enseguida salieron, sin continuar la navegación en una siguiente página. Consideremos
dos escenarios con dos usuarios, 1 y 2.
El
usuario 1. Llega a nuestra web, ve nuestro contenido por
30 segundos y decide marcharse o cerrar la ventana.
El
usuario 2. Llega a nuestra
web, se queda leyendo nuestro contenido durante 4 o 5 minutos y sin hacer clic en otra sección
decide marcharse.
Aunque los dos visitantes hayan rebotado, vemos que mientras el usuario
1 posiblemente no haya encontrado nada de utilidad, el usuario 2 posiblemente
si lo haya hecho. Esta métrica se le denomina tiempo de permanencia como se definió anteriormente y tiene una
correlación más directa con la probabilidad de realizar la compra. Si nuestra métrica
nos indica alta tasa de rebote y poco tiempo de permanencia, es una señal que
no estamos captando la atención del usuario, no obstante un tiempo largo de
permanencia puede significar que el contenido responde de manera positiva a los
intereses del usuario.
Para el caso de una estrategia de e-mail
marketing, la tasa de rebote será el resultado de dividir el número de e-mails
que no llegaron a su destinatario entre el total de e-mails enviados. Si se
enviaron 300 e-mails y no llegaron 50, la tasa de rebote será del 16%. (50/300)*100=16%
Tasa
de abandono:
mide el porcentaje de compradores que empiezan a llenar un formulario de
carrito de compras pero después salen del sitio web sin completar el
formulario. Las tasas de abandono pueden significar varios problemas
potenciales: un mal diseño del formulario, falta de confianza del consumidor o
incertidumbre del consumidor ocasionada por otros factores.
Tasa
de retención.
Según la ley de Pareto el 20% de tus clientes te darán el 80% de tus beneficios
en los próximos años. A veces nos concentramos más en conseguir nuevos clientes
que en mantener a los actuales. Por lo que cuesta más conseguir nuevos clientes
que retenerlos. La tasa de retención de clientes consiste en dividir el número
de clientes fieles (que compran) en un periodo de tiempo entre el total de
clientes. De acuerdo al tipo de negocio la tasa de retención se puede realizar
de manera mensual o anual. Lo importante es trabajar para que la retención
aumente de periodo a periodo como indicador de calidad de nuestro trabajo.
Coste
por Lead.
Un Lead es un visitante de un sitio web, un potencial cliente que ha mostrado interés
en nosotros dejando sus datos en nuestro sitio. Para calcular el costo por
Lead, calcula el costo promedio de la campaña y compárala con el número de
leads que ésta ha dejado. Si invertimos U$ 100 en publicidad en Google ads para
una campaña y de esa campaña 10 personas
han dejado sus datos o han llegado a una landing page el CPL será de U$ 10.
No debemos confundir, pues, las
herramientas que utilizamos para contabilizar visitas, rebotes o conversiones
con el verdadero proceso de la analítica web. Estas herramientas nos aportan
sólo los datos, pero éstos deben
ser correctamente seleccionados,
analizados e interpretados para convertirlos en información útil que nos sirva
para tomar decisiones que, finalmente generen una mejora. En analítica web,
suele decirse que no vale la pena estudiar un dato si no nos va a servir para tomar
una decisión.
¡Hasta pronto!