La revolución
digital a la que asistimos, a la que nos vemos enfrentados sacude a toda la
sociedad por igual. Los modelos de negocio, la política, la cultura y nuestra
propia vida no son la misma desde la irrupción de las redes sociales e
internet, donde las Apps facilitan la vida y el Smartphone se convierte en
parte indiscutible del ser. Una nueva forma de economía colaborativa ha surgido
en los últimos años donde las personas
hacen menos llamadas por telefonía celular convencional y más llamadas gratis a
través de WhatsApp, Netflix no es un operador por cable pero pone contra las
cuerdas a los cable operadores de cada país, basta con una conexión a internet
y una tarjeta de crédito, gracias a la cual las personas disfrutan de sus contenidos
sobre cualquier dispositivo a cualquier hora y en cualquier lugar. En menos de
diez años la tecnología ha alterado significativamente la forma de aprender y
compartir de niños y jóvenes, donde el profesor ya no es el único educador y el
autoaprendizaje a través de la experiencia cobra relevancia como Lo demuestra
el éxito que tienen los llamados MOOC (Masive Open Online Courses), en donde el
profesor juega un papel diferente siendo más facilitador de dialogo que el catedrático
que dicta una clase. Los consumidores pasaron de lectores a productores de
contenido “prosumidores”, la web les permite a las personas emitir desde una
opinión, queja o felicitación, reclamar o simplemente compartir experiencias a
través de imágenes, videos, música con
sus pares y grupos de interés. Las personas hoy día creen en las recomendaciones de sus amigos y
terceros y antes de tomar una decisión de compra buscan información en la web y
redes sociales, donde más del 80% de las personas creen en las recomendaciones
de terceros y menos del 20% cree en la publicidad masiva o intrusiva. Amazon es
el mayor supermercado del planeta sin un
solo local ni vitrina y donde Uber se ha convertido en un dolor de cabeza para las
empresas de transporte. Las audiencias o públicos que se conforman alrededor de
la información generada por un medio poseen algunas características que nos pueden ayudar a analizarlos y, por
ende, a hacer un trabajo más eficiente como generadores de contenido.
Son fragmentadas.
Hoy en
día las audiencias son fragmentadas porque han trascendido el esquema tradicional de los medios de
comunicación, es decir han dejado de ser totalmente masivas. Antiguamente se enviaba un
solo mensaje que trataba las temáticas para
un público pasivo y monolítico, no se consideraban las diferencias culturales ni psicológicas. En
la publicidad tradicional o de medios de comunicación tradicionales, prevalece
un análisis demográfico en términos de edad y genero sin subdivisiones; por
ejemplo, si se consideraba que había un programa femenino, se tenía en cuenta la temática más relacionada a la pareja, la maternidad y la familia; no había
posibilidad de hacer una subdivisión hacia la profesión, la decisión de no tener
hijos, la preferencia sexual u otro tipo de interés. Hoy día la publicidad
evoluciona para hablar más de lo que considera públicos definidos por características
psicográficas o por estilos de vida, que por una mera
división basada en edad y género. Por lo tanto la publicidad comienza a establecer nichos de
mujeres profesionales solteras, casadas con hijos, profesionales solteras sin hijos,
profesionales preocupadas por la maternidad, además de las tradicionales amas
de casa o madres de familia. Un claro ejemplo es la serie Sex and the City. El éxito
de la serie se deriva del psicográfico de las mujeres ejecutivas con buen nivel
de ingresos que buscan a su pareja ideal. Con edades que oscilan entre 30 y
casi 50 años, las une su estilo de vida, su forma de pensar y la forma como enfrentan la realidad.
Tienen intereses comunes
Todo
grupo se integra a partir de un interés común que sea de su agrado o que desea
compartir. Ese interés común está dado por poder compartir temas de interés, alrededor
de aficiones, gustos, experiencias y preocupaciones. Cada temática puede ser
contenido magnético para cada audiencia objetivo. De lo contrario generar
contenido no tendría ningún sentido
real. Ahora bien, cuando se cumple con el objetivo de generar contenido como imán es porque ya sabemos los intereses de nuestra
audiencia y que esa información seguramente será de interés para ellos. De esta
manera, es posible integrar un grupo de ciclistas de montaña porque los une su afición
o conformar un grupo a partir de una preocupación, como lo es la degradación del
medio ambiente por el calentamiento global. El contenido es el
rey. Y por lo tanto cobra importancia vital. Es el elemento unificador por el
que dos o más personas forman una comunidad.
Son horizontales.
Se
puede decir que los medios de comunicación
ya no tienen el monopolio informativo, hoy los integrantes de las audiencias están
en un nivel de igualdad con ellos porque
muchos son expertos en la materia dada. La horizontalidad de las audiencias o
comunidades las hace verse más como
redes de usuarios integrados por un tema
en común, con capacidad de relacionarse y actuar. Los integrantes de las audiencias
actuales buscan contenidos que les sean útiles
y relevantes, y no que alguien se los de. Quienes influyen en sus propias
decisiones son las propias redes
sociales, sus amigos y familiares, no alguien impuesto por algún medio. Ellos buscan
la información que requieren, cuando así lo desean y no esperan a que se inicie
en los noticieros. Por lo tanto el contenido debe generarse de acuerdo con las temáticas de interés para cada
audiencia.
Generan contenidos.
En
diciembre de 2006 en la portada de la revista Time aparece un monitor y su
teclado con la palabra Tú. El consumidor “Tú” es quien controla la información.
De acuerdo con la revista se escogió la
palabra “Tú” como el personaje de ese
año, debido al crecimiento y a la enorme influencia de los contenidos generados en redes
sociales, Blogs y You Tube. Desde entonces quedo claro que es el propio usuario
quien posee el control sobre los contenidos ya sea para generarlos, en términos
de lo que desea leer o para leerlos cuando quiera. Para muchos esto es la
democratización de los medios donde se rompe el monopolio informativo en el que
la comunicación se daba de forma unilateral entre emisor y receptor. El esquema
de comunicación de masas tradicional se eliminó para convertir al receptor en
emisor y hasta emisor múltiple. La audiencia tiene la oportunidad de generar
contenidos con las herramientas puestas a su disposición en la red. Al tener
contenido suficiente y que genere valor para cada comunidad que se conforma en el
medio, podemos entender por qué se
considera que las audiencias son el corazón
del negocio.
Son asincrónicas
Cuando
se escribe un correo electrónico no se tiene una relación directa con la
persona. Se escribe un texto y se envía. La persona a quien se le ha enviado el
mensaje lo encuentra cuando mira el buzón
de su correo electrónico y entonces puede contestarlo. Esta es una forma de
comunicación asincrónica. Con internet Las
audiencias de hoy buscan contenidos diversos en momentos también diferentes y
está la posibilidad de localizar los
contenidos cuando quieran. Buscan información
en cualquier lugar del mundo y
desde cualquier ubicación geográfica, a la hora que lo deseen. Todo contenido que se produce en cualquier momento se mantiene
archivado en la red y puede encontrarse cuando el usuario lo necesite. En este
momento hay audiencia sin límites en cualquier parte del mundo, que son activas,
asincrónicas, horizontales y, hasta cierto punto desconocidas.
No les gustan los intermediarios.
Al romperse el
esquema de tiempo y espacio, las comunidades o las audiencias se dividen más, por lo que ahora buscan los contenidos en el momento que ellos desean. Así
ellos tienen el control de la información
pero sobre todo opinan sobre esos contenidos y generan otros nuevos. La persona
o usuarios ahora controlan la generación
y búsqueda de contenido, las redes sociales y plataformas tecnológicas le permiten realizar y compartir videos, fotografías y textos. A través
de sus dispositivos móviles y tabletas pueden producir su propio contenido
de manera económica y creativa, y distribuirlos casi en tiempo real y
recibir mensajes de la red social a la que pertenece. Si la audiencia o el usuario son quienes tienen el control sobre la red, es lógico que no
quieran que otra persona o un tercero participen
diciéndole cuál contenido es importante.
Son volátiles.
Principalmente
para la generación Z donde su capacidad de atención es de 8 segundos. La
volatilidad de la audiencia y su
rebote de un sitio son puntos que deben tener en cuenta las
empresas cuando de hacer contenido de interés
se trate. No solo las fuentes de información varían, sino que, además las personas cuentan con
la opinión del resto de usuarios
de la comunidad con referencia a los temas que les interesan. En este caso si el usuario no encuentra los contenidos deseados y
en el momento deseado, tendrá una mala experiencia y quizá no vuelva al sitio. Por
lo tanto su objetivo es conseguir la atención y la lealtad de sus
audiencias realizando contenidos
relevantes que generen largos tiempos de uso
dentro de las plataformas digitales.
Viven un momento acelerado de la
información.
Si alguien
quería enterarse de algo sintonizaba el canal de televisión o se conectaba a la
radio, con la llegada de internet ningún
medio, encontró los beneficios de transmitir la noticia en tiempo real. Así el usuario
aprendió a seguir a varios medios o a líderes de opinión por medio de herramientas
como twitter. De esta manera los medios tradicionales comienzan a ser
rebasados, tal como ocurrió con la
muerte de Michael Jackson en 2009, con la muerte del cantante Prince o incluso con la de George Michael, la gran mayoría nos enteramos primero por twitter y después
por las páginas digitales de los medios tradicionales. En este sentido hoy las
audiencias valoran la velocidad de la información. Los medios que publican primero la noticia, aunque sea como flash
informativo, es el que gana la atención y por supuesto la audiencia. Lo demás consiste en dar detalles y empaquetar la
información.
Los departamentos
de marketing necesitan hoy contar con la habilidad de saber administrar las tecnologías
y saberlas utilizar para rastrear, medir y comprender la conducta de los
clientes. El mundo se ha digitalizado y la mejor prueba de ello es la enorme
cantidad de datos que se generan en la web diariamente. Pasamos de entornos de
la década de los ochenta y noventa en particular bastantes estáticos a entornos
hiperactivos donde las personas no solo participan sino que además manifiestan
sus opiniones no solo con sus productos de interés sino con relación a diversos
temas. Las empresas como los profesionales
de marketing necesitan responder con
mayor velocidad a la retroalimentación de sus audiencias en especial en medios
sociales pues las comunicaciones de marketing han trascendido a un trabajo que se realiza las 24 horas del día 7 días a la semana. Nunca se acaba solo
evoluciona. Necesitamos mantenernos flexibles ante un entorno cambiante, para
escuchar y adaptarnos de manera continua a los permanentes cambios del entorno.
¡Hasta
pronto!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario